III Censo Latinoamericano de Arte Contemporáneo

Arasy Benítez

Curadora y gestora cultural de Mandaçaia Projetos

Río de Janeiro – Brasil

Entre el 1 y el 31 de octubre de 2025 se está realizando el III Censo Latinoamericano de Arte Contemporáneo, una iniciativa que busca generar un diagnóstico sobre las condiciones laborales de la economía del arte en la región, y así comprender mejor las condiciones materiales en las que trabajamos y vivimos. El censo pretende actualizar y ampliar el conocimiento sobre las condiciones laborales, las redes de trabajo y las prácticas creativas de artistas, curadores, gestores, mediadores, montajistas, periodistas culturales y tantos otros agentes del sistema del arte contemporáneo en América Latina. A través de esta iniciativa, se busca visibilizar la diversidad y complejidad del ecosistema artístico regional, fomentando el diálogo crítico y la generación de políticas culturales inclusivas.

Un campo diverso, pero con un circuito específico

El III Censo Latinoamericano de Arte Contemporáneo se enfoca en el arte visual, la performance, el arte sonoro, los procesos sociales, el arte y tecnología y prácticas que circulan en torno a bienales, museos, colecciones, galerías y exposiciones. Se trata de un circuito que organiza la economía simbólica y material del arte contemporáneo tal como se entiende a nivel internacional.

No significa que la danza, la música, el teatro o el cine no sean disciplinas artísticas. Al contrario, lo son en toda su potencia. Pero cada una de estas áreas tiene circuitos de circulación distintos, con festivales, temporadas, industrias culturales y marcos normativos propios. En este sentido, este censo, no las excluye de manera arbitraria, sino que responde a una decisión metodológica: mapear con detalle un campo específico, el del arte contemporáneo, para visibilizar sus dinámicas y problemáticas.

¿Quiénes participan y cómo?

El censo está abierto a una amplia gama de trabajadores del arte contemporáneo: artistas, curadores, investigadores, historiadores, gestores, productores, galeristas, coleccionistas, funcionarios de instituciones públicas y privadas, profesores, mediadores, montajistas, periodistas culturales y otros profesionales vinculados al arte. La convocatoria es abierta y dirigida al conjunto diverso de agentes que conforman las escenas de arte en contextos urbanos, rurales, independientes e institucionales.

Entre el 1 y el 31 de octubre de 2025 el formulario estará disponible en la página de Trabajadores de Arte Contemporáneo.

En el caso de Paraguay, me toca coordinar el núcleo de apoyo a la comunicación. En este esfuerzo, ya contamos con el apoyo de la Asociación de Galerías de Arte del Paraguay (ASGAPA), cuyo acompañamiento es clave para ampliar la visibilidad y alcance de la iniciativa en el país. Contamos también con el apoyo de colectivos de artistas y gestiones autónomas locales como Room Service Intl. La invitación para colaborar con el núcleo de apoyo a la comunicación sigue abierta, por lo que convoco a organizaciones, artistas y colectivos a ponerse en contacto conmigo o directamente con Trabajadores de Arte para sumarse a este proceso colectivo.

Aprendizajes de ediciones anteriores

Este es el tercer censo que impulsamos desde Trabajadores de Arte Contemporáneo – Latinoamérica. El primero se realizó en 2015, el segundo en 2020, y ambos dejaron aprendizajes valiosos. En cada edición se pudo comprobar que el trabajo en arte sigue marcado por la precarización, la falta de contratos claros, la ausencia de seguridad social y la desigualdad de oportunidades.

La información recopilada en los dos censos anteriores permitió abrir debates, organizar asambleas y crear herramientas concretas. Entre ellas se destaca el Acuerdo de Trabajadores de Arte, vigente desde 2012, que propone parámetros mínimos de remuneración y buenas prácticas, disponible en el sitio trabajadoresdearte.org. También se produjeron libros como el Manual de Acción, elaborado de forma colaborativa por 106 trabajadores y revisado y actualizado colectivamente en enero de este año. Además, se creó el juego de mesa ¿Quién Quiere Vivir del Arte?, pensado para reflexionar de manera lúdica sobre la economía del arte.

Con esta tercera edición queremos ir más lejos. En primer lugar, incorporamos metodologías renovadas, a través de un comité consultivo ampliado conformado por artistas e investigadores de ciencias sociales. En segundo lugar, buscamos ampliar el alcance del censo y, en este sentido, la participación de los trabajadores paraguayos resulta fundamental para fortalecer la dimensión regional del diagnóstico. Por último, queremos captar nuevas tendencias y problemáticas emergentes en el contexto latinoamericano, reconociendo que el arte contemporáneo está en constante transformación.

El mundo del arte no es estático, y en América Latina menos aún: nuestros contextos cambian con rapidez, marcados por desigualdades estructurales, transformaciones tecnológicas que inciden directamente en nuestras prácticas y crisis políticas. Por dar un ejemplo del contexto en el que trabajo, entre 2020 y 2021 el sector cultural brasileño registró una pérdida estimada de aprox. USD 13,27 mil millones de generación de ingresos. Lo que explica ese declinio es la combinación de la crisis generada por la pandemia sumada a la extinción del Ministerio de Cultura durante el gobierno de Jair Bolsonaro, lo que dejó a la economía cultural —y dentro de ella la economía del arte— en una situación de enorme fragilidad.

La importancia de producir datos desde el propio campo

¿Por qué hacer un censo de arte contemporáneo? Porque sin información concreta es imposible exigir condiciones justas, trazar estrategias colectivas de clase y diseñar estrategias individuales de carrera. Los Estados y las instituciones demandan datos y diagnósticos antes de tomar decisiones. Si no producimos nuestros propios datos, corremos el riesgo de quedar invisibles en las estadísticas oficiales, que con frecuencia reducen el arte a la categoría de “entretenimiento” o “industria cultural”, sin reconocer sus especificidades.

Tal vez Brasil sea el país que cuenta con las políticas públicas más consolidadas en el ámbito cultural y un sistema de arte relativamente más saludable en comparación con otros países de la región, que combina mercado, instituciones y gestiones autónomas. Según una investigación inédita, realizada por la Associação Brasileira de Arte Contemporânea (ABACT) en alianza con la Agência Brasileira de Promoção de Exportações e Investimentos (ApexBrasil), concluida en diciembre de 2024, el mercado de arte brasileño movió aproximadamente USD 580 millones, lo que representó un aumento del 21% con relación al año anterior.

Participar es sencillo y anónimo. Lo más importante es que cada respuesta se suma a un diagnóstico regional que nos permitirá tener mayor fuerza a la hora de dialogar con instituciones, gobiernos y otros actores del sistema.

Invito a todas las personas que forman parte del campo del arte contemporáneo a sumarse. Solo con información precisa podremos transformar nuestras condiciones y proyectar un futuro más equitativo para las próximas generaciones de artistas. Recomiendo que sigan la página @trabajadoresdearte para participar del censo y acompañar los resultados.