En el dinámico y altamente competitivo contexto empresarial actual, la clave para sobresalir se denomina Consumer Centricity. La experiencia del cliente ha emergido como el factor distintivo principal para las marcas, obligándolas a garantizar interacciones rápidas, personalizadas y fluidas, sin importar el momento o canal de comunicación elegido por el usuario. Consumer Centricity se presenta como una estrategia fundamental para cultivar relaciones sólidas y duraderas…